Los propósitos de año nuevo suelen ser una costumbre más que una lista de metas realistas. ¿Sabías que aproximadamente el 92% de las personas no logra cumplir sus propósitos?

¿Cuáles fueron tus propósitos al comenzar el año? ¿Incluían ahorrar, leer más, hacer ejercicio, pasar tiempo en familia, disfrutar más la vida o reducir malos hábitos como beber, fumar o comer en exceso? La mayoría de las personas comparte propósitos similares, pero en la realidad, pocos los cumplen.

De acuerdo con un estudio de la Universidad de Scranton, Pensilvania, la razón principal del fracaso en los propósitos radica en su formulación vaga y falta de una estrategia. La clave para tener éxito en el cumplimiento de los propósitos radica en establecer objetivos concretos y en seguir una estrategia planificada.

Objetivos, No Propósitos

¿Por qué no considerar establecer objetivos en lugar de propósitos? También puedes llamarlos retos. La idea es que la palabra “objetivos” suene más realista y alcanzable en comparación con “propósitos”, que pueden parecer algo mágico e irreal. Al plantear objetivos, se enfatiza la especificidad y la realidad de la meta.

Sé S.M.A.R.T.

En el mundo empresarial, se utilizan los objetivos SMART (inteligentes) para ejecutar planes y estrategias exitosas. Aplicaremos este enfoque a nuestros objetivos para que sean efectivos.

El método SMART significa:

  • S de Specific (Específico): Los objetivos deben ser específicos y detallados. En lugar de decir “Voy a ir al gimnasio”, es mejor decir “Iré al gimnasio los lunes, miércoles y viernes por la mañana antes del trabajo”.
  • M de Measurable (Medible): Debes ser capaz de medir el progreso hacia tu objetivo. Por ejemplo, si tu objetivo es hacer ejercicio, puedes medirlo por la frecuencia y el peso perdido, como “Iré al gimnasio 3 veces a la semana antes del trabajo y me pesaré cada fin de semana para monitorear mi pérdida de peso”.
  • A de Achievable (Alcanzable): Tu objetivo debe ser alcanzable. Si deseas perder peso, establece una meta de pérdida de peso realista, como “Debo perder al menos 1 kilogramo cada vez que me pese”.
  • R de Realistic (Realista): El objetivo debe ser realista y alcanzable. Evita establecer objetivos fantasiosos que no puedas cumplir.
  • T de Time-Related (Tiempo Específico): Fija un plazo para alcanzar tu objetivo. Por ejemplo, si deseas perder peso, establece un período de tiempo específico en el que esperas lograrlo.

Aplica este enfoque a cada uno de tus objetivos para hacerlos más alcanzables y realistas. De esta manera, te sentirás más comprometido a cumplirlos y reducirás la probabilidad de abandonarlos a mitad de año.

Recuerda que es importante no tener una lista excesivamente larga de propósitos; es mejor centrarse en unos pocos y trabajar en ellos gradualmente. Si logras mejorar tus hábitos y cumplir tus metas, puedes avanzar hacia la lista de tus objetivos para el próximo año con confianza y éxito.

 

Este año SÍ cumple tus propósitos: hazlos S.M.A.R.T.
Este año SÍ cumple tus propósitos: hazlos S.M.A.R.T.

 

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