El ser humano siempre le ha buscado el sentido de la vida: de ahí las múltiples corrientes filosóficas, religiones, teorías cospiranóicas, la ciencia ficción, los escritores con best sellers intentando explicar por qué estamos aquí y hacia donde vamos.
Tal vez el sentido de la vida está dentro de nosostros o más cerca de lo que pensamos. O lo vivimos cada día. Tal vez ni siquiera deberíamos preguntarnos eso. Quien sí se lo preguntó fue el psiquiatra vienés Viktor Frankl, padre de la Logoterapia, un tipo de psicoterapia que busca motivar a las personas a través del sentido.
Este psiquiatra no tenía como fin buscar la felicidad, sino buscar ese sentido que permitiera encontrarla. De acuerdo a él, hay 3 formas de encontrarle ese sentido a la existencia:
A través de una misión
Esto podríamos traducirlo como un “porque tengo cosas qué hacer” si le preguntamos a alguien por qué está en esta tierra. Normalmente, este concepto se liga al servicio o vocación. Cuando usas tus habilidades y talento para los demás, la vida toma sentido y esas “cosas que tienes qué hacer” son lo que vales y aportas.
A través de la contemplación
Es encontrar el sentido de la vida a través de disfrutar de los pequeños detalles. Esos placeres que disfrutas a diario y a veces ni te das cuenta. Puede ser un hobbie, un deporte, la comida, pasar tiempo con las personas que quieres, escuchar música, viajar. Estos son placeres que parecen sencillos, pero le dan un gran sentido a la vida.
A través del amor
Aquí,el sentido de la vida yace en las personas que quieres y a las que les importas. Esa sensació de querer estar aquí y ahora porque también te aman. Este es uno de los motivamentes más poderosos para hacer cosas, ponerse metas, temrinar proyectos o hacer cualquier cosa sin darnos por vencidos. Las personas que queremos son una inspiración constante para ser mejores.
Estos son sólo algunas de las formas en las que puedes encontrarle sentido a tu vida, pero puede ser que para ti existan más, ya que este concepto es mucho más complejo de lo que parece y por ello desde el principio de la humanidad le hemos dedicado tanto tiempo a descubrirlo.
