Autocuidado y Selfcare: Mejora tu Bienestar
Seguramente has escuchado hablar del selfcare, pero ¿sabes qué es realmente? Conocer el concepto de selfcare o autocuidado es más que una moda; es una manera de explorar, validarte y priorizar tu bienestar personal.
Cuando nos preguntan si nos cuidamos, la respuesta suele ser afirmativa. Sin embargo, ¿podemos detallar cómo lo hacemos? Aquí es donde entra en juego el concepto de autocuidado.
A pesar de su simplicidad, el autocuidado es esencial para nuestro equilibrio físico, emocional y mental. No se trata solo de mimarnos ocasionalmente, sino de establecer una práctica deliberada que nos nutra en todos los aspectos.
¿Qué es el Selfcare o Autocuidado?
El selfcare o autocuidado implica cualquier acción que tomamos intencionalmente para cuidar nuestra salud emocional, mental y física. Aunque puede parecer evidente, muchas veces pasamos por alto su importancia en nuestras vidas. Una adecuada práctica de autocuidado no solo mejora nuestro estado de ánimo, sino que también reduce la ansiedad y fortalece nuestra relación con nosotros mismos y con los demás.
Definición de lo que NO es Autocuidado
Comprender lo que NO es autocuidado puede arrojar luz sobre el concepto. Autocuidado no significa forzarnos a hacer cosas que no disfrutamos. Como bien explicó la psicóloga Agnes Wainman, el autocuidado es una forma de “recargarnos” en lugar de agotarnos.
El autocuidado tampoco es egoísmo. No se trata solo de satisfacer nuestras propias necesidades, sino de reconocer lo que nos permite cuidarnos para luego cuidar a los demás. Si no cuidamos de nosotros mismos, nos resultará difícil cuidar de nuestros seres queridos de manera efectiva.
Implementando el Autocuidado en tu Vida
Empezar con el autocuidado no requiere pasos gigantes. Comienza por lo básico y, con el tiempo, encontrarás tu propio ritmo y rutina. Planifica activamente tus prácticas de autocuidado y comunica tus planes a otros para aumentar tu compromiso.
Mantén la conciencia en tus acciones. Sé consciente de lo que haces, por qué lo haces, cómo te sientes y cuáles son los resultados. Aunque el autocuidado es personal, aquí hay algunas actividades que puedes considerar para incorporar a tu vida:
- Identifica lo que no te gusta y lo que ya no quieres hacer, y crea una “lista de no”.
- Establece una dieta balanceada y presta atención a tu alimentación.
- Asegúrate de dormir lo suficiente cada noche.
- Incorpora ejercicio físico, que beneficia tanto tu salud emocional como física.
- No postergues las visitas médicas y haz un seguimiento de tu atención médica.
- Pasa tiempo de calidad con tus seres queridos.
- Realiza al menos una actividad relajante todos los días.
- Disfruta de una actividad placentera a diario, como cocinar o reunirte con amigos.
El autocuidado es una inversión en ti mismo, una práctica que contribuye a tu bienestar general. ¡Empieza a implementarlo en tu vida y prioriza tu salud mental y emocional!
